Psicóloga UC
La Organización Mundial de la Salud señala que la actividad física es cualquier Movimiento Corporal, es decir, es cualquier acción o desplazamiento que realice tu cuerpo producido por los músculos esqueléticos. Esto incluye desplazamientos, actividades de ocio, entrenamientos, etc. Probablemente te parezca más familiar hablar de actividad física, pero hablar de movimiento corporal nos permite incluir una mayor variedad de actividades. Por ejemplo, caminar, andar en bicicleta, bailar y jugar son todas formas de movimiento corporal. Mover tu cuerpo de forma habitual potencia tu salud mental. Diversos estudios muestran que es un hábito efectivo para reducir el estrés cotidiano y mejorar la calidad de vida. Además, es esencial para la vida, ya que permite aprender y desarrollar habilidades. Por ejemplo, al jugar un deporte en equipo, se practican habilidades como toma de decisiones, razonamiento matemático, dominio del cuerpo, atención y habilidades sociales.
Regula tu sistema neuroendocrino, el cual es el sistema de comunicación dentro del cuerpo que asegura que todas sus partes funcionen en armonía, ayudando a que te sientas de buen humor y más tranquilo.
Potencia tu sistema inmune, reduciendo el riesgo de enfermedades que pueden afectar tu estado de ánimo.
Mejora tu sistema metabólico, usando la comida de manera más eficiente y proporcionando más energía.
Cuando mueves tu cuerpo experimentas un aumento en el flujo sanguíneo, lo que implica que tu corazón bombea más sangre no solo a tus músculos, sino también a tu cerebro. El incremento en el flujo sanguíneo transporta nutrientes y oxígeno a las células cerebrales, mejorando así su rendimiento. Además, favorece la neuro plasticidad, que es la capacidad que posee el cerebro para regenerarse, modificarse y adaptarse a nuevas experiencias y desafíos.
Disminuye tu malestar emocional y mental: El movimiento corporal previene y disminuye síntomas de la depresión y ansiedad. Esto se debe a que aumenta el estado de ánimo, reduce pensamientos de preocupación, disminuye el estrés y la ansiedad mental y corporal.
Mejora la conciencia de los estados internos de tu propio cuerpo: El movimiento corporal te ayuda a conocerte mejor, lo que puede ayudar a prevenir trastornos mentales. Al moverte, te conectas con tu cuerpo y aprendes a reconocer sus señales internas, como sentimientos, pensamientos y sensaciones. Por ejemplo, puedes notar tu respiración, la posición de tu cuerpo o tus pensamientos.
Permite regular tus emociones: Propicia la regulación de las emociones displacenteras, al focalizarnos en el presente, el ambiente y en nuestro cuerpo.
Potencia tus habilidades cognitivas: El movimiento corporal puede ayudarte a rendir mejor en el colegio o el trabajo. La ciencia dice que mejora la memoria, la atención, la toma de decisiones y previene el deterioro cognitivo.
Mejora la calidad del sueño: El movimiento corporal mejora la salud mental al aumentar la producción de melatonina (hormona inductora del sueño) y reducir los niveles de cortisol (hormona que se libera en respuesta al estrés). Esto permite un mejor descanso.
Tiene beneficios sociales: Las actividades grupales de movimiento corporal mejoran las habilidades sociales, reducen el aislamiento y la soledad, y fomentan el apoyo social. Además, estudios demuestran que mejoran la resolución de conflictos y el afrontamiento de dificultades.
Fomenta la autoestima y satisfacción con la vida: Potenciarás tus recursos personales al desarrollar cualidades y habilidades de tu agrado, generando mayor satisfacción y confianza en ti mismo. Por ejemplo, si andas en bicicleta desarrollas más resistencia física, dominas mejor los obstáculos del camino y te sientes más fuerte o rápido, generando más optimismo.
Mantener una rutina de movimiento puede ser difícil por diferentes razones. La evidencia científica señala que moverte es más beneficioso si lo realizas constantemente y con intensidad, pero muchos estudios también respaldan beneficios en la salud mental en una diversidad de actividades y ritmos. Lo fundamental que debes saber, es que mover tu cuerpo puede ser variado y creativo y si un día no puedas moverte ¡no hay problema!, lo importante es que vuelvas a retomar la actividad de movimiento que te permita tu rutina. Busca algo que sea de tu agrado y recuerda que el progreso es gradual.
Pueden pasar al menos 8 semanas de compromiso antes de reconocer la mayoría de los beneficios, pero a corto plazo puedes verlos después de tan sola una actividad de movimiento corporal. ¡Todo movimiento cuenta!
Si quieres potenciar más los beneficios del movimiento corporal para tu salud mental, concéntrate en lo que estás haciendo en ese momento con tu cuerpo y chequeando qué sientes al moverte.
Ser una persona activa implica incorporar el movimiento corporal de manera regular y consciente a tu estilo de vida de para promover tu salud física y mental. En tu día a día, buscarás activamente oportunidades para moverte, encontrando placer en ello, ya sea a través del baile, la práctica de deportes, caminatas al aire libre, jugar, o simplemente al elegir subir escaleras. Cada vez que te permites moverte, estas dando un paso a que una versión más activa de ti aparezca y obtenga grandes beneficios para su salud mental de manera permanente.
Consiste en una breve interrupción de la actividad laboral o académica para hacer movimientos físicos simples y revitalizantes. Permiten combatir el cansancio, mejora la concentración y reduce el estrés al incorporar el movimiento corporal diariamente.
¿Cómo realizarlas?
Identifica qué cosas te gusta hacer, por ejemplo, prefieres las actividades con compañía o individuales, prefieres movimientos intensos o más suaves, etc. Es importante que identifiques qué cosas te gustan para encontrar la actividad que más te agrade.
La Organización Mundial de la Salud recomienda diferentes niveles de movimiento corporal según grupos de edad.
Para niños y adolescentes se recomienda en promedio 1 hora al día de actividades de movimiento físico aeróbico, es decir, actividades que hagan que tu corazón lata más rápido y te hagan respirar más fuerte. Y al menos tres días a la semana de movimientos que permitan fortalecer músculos.
Para adultos, se recomiendan actividades de movimiento aeróbico entre a 5 horas a la semana dependiendo de la intensidad.3 También, recomiendan actividades de fortalecimiento muscular al menos 2 días a la semana.
Para las personas mayores de 65 años, se aplican las mismas recomendaciones que para los adultos, agregando actividades de movimiento variado para trabajar equilibrio y fuerza muscular, al menos tres veces a la semana. Esto ayuda a mantener la habilidad de realizar actividades cotidianas de manera independiente y sin dificultades.
El sistema neuroendocrino es el equipo mensajero del cuerpo, conformado por el sistema nervioso y el sistema endocrino. Combinando mensajes eléctricos y mensaje químicos. Estos dos sistemas envían mensajes importantes a todo tu cuerpo, para asegurarse que todo funcione correctamente. Por ejemplo, regulan algunas cosas como el crecimiento, el metabolismo, el sueño, el hambre y la respuesta al estrés entre otras funciones para mantener tu cuerpo equilibrado y saludable.
Es la capacidad del cerebro para adaptarse, cambiar y reorganizarse a lo largo de la vida en respuesta a la experiencia. Es decir, es la capacidad del cerebro para formar nuevas conexiones entre las neuronas, y reorganizar su estructura para adaptarse a nuevas situaciones o aprender nuevas habilidades. La neuro plasticidad es fundamental para procesos como el aprendizaje y la memoria.